No existe el miedo al papel en blanco, ni el bloqueo del folio en blanco, ni nada de eso. Todo lo contrario. Sólo se le teme a la memoria, aunque este temor sea en futuro, aunque suene a paradoja e incluso lo sea. Pero el vacío no tiene siquiera filo. Es bien redondo. Suave incluso.
Estos días me he recordado unas cuantas veces escribiendo tarjetas de navidad. Un montón inmenso. Una mañana. O dos mañanas de pares de frases y saludos. Todas las tarjetas tan juntas unas de otras y dos días después, tan separadas. Una mañana. O dos mañanas deseando acabar, o hacer una pausa para un café y un pincho de tortilla. Porque lo único que uno ve en esa mañana de invierno —lo juro— es un montón inmenso. Luego se va inventando salidas, puertas traseras, cansancios, hambres, lo que sea con tal de esquivarlo. Por si ha desaparecido el montón al regresar de la cafetería. Estos días me he recordado unas cuantas veces escribiendo tarjetas de navidad para personas a las que quería que le llegaran la frase y los saludos. A algunos, los abrazos. Es difícil escribir tan juntas tarjetas que luego tienen que vivir tan separadas. Son difíciles esos treinta segundos que luego se hinchan y duran hasta mediados de enero, o febrero. O hasta nunca, porque se pierden pegados a una esquina del buzón. No tiene el mismo tiempo quien escribe la tarjeta que quien la lee. Y tiene mucho menos que quien la relee. Una relación asimétrica de la que no se acuerda quien lee, y que tiene presente quien se sienta junto al montón. No existe el miedo al papel en blanco, ni el bloqueo por el vacío. Ni nada. Es la asimetría que empieza a crecer cuando ya se ha escrito.
Por eso estos días que me recuerdo tantas veces con las tarjetas de navidad, intento dar con palabras capaces de hincharse con el tiempo de cada uno. Que no se queden flojas por culpa de un agujerito por el que se les escape la fuerza. Que no difieran mucho de las que querrían leer. Y de las que querrán leer. Sé que si no es inútil, poco le falta. También sé que habrá a quien no le importen un carajo la frase y los saludos. Pero a mí sí.
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“Son difíciles esos treinta segundos que luego se hinchan y duran hasta mediados de enero, o febrero. O hasta nunca, porque se pierden pegados a una esquina del buzón (…)”
ResponderEliminar“Por eso estos días (…)intento dar con palabras capaces de hincharse con el tiempo de cada uno”
Chapeau
Rellenar ese infimo espacio en blanco docenas de veces sin caer en la retorica y de verdad expresando el mensaje que finalmente quieres que reciba el remitente es una tarea no solo dificil, sino ardua. Y puede extrapolarse a esas postales que escribe uno a sus seres queridos cuando esta de viaje en un lejano lugar.
ResponderEliminarEmpiezas la tarea con ilusion, con ideas, pero a medida que vas rellenando ves que tienes mismas ideas sobre remitentes distintos. Y sin darte cuenta empiezas a repetir cliches de tal forma que las 7 ultimas postales no son mas que un refrito resumido de lo las 3 primeras, eso si, diferentes entre si.
Cuando compruebas el resultado final, este es desesperanzador, y unos, como tu dices buscan salidas o puertas de atras, otros, mas kamikazes, como es mi caso, escapamos hacia delante y nos tapamos los ojos mientras introducimos el mazo de postales en el buzon.
Una vez hecho, es como si una pesada losa dejara de aplastarte. Pero claro, para eso hay que ser un sinverguenza sin ningun tipo de conciencia como es mi caso….;)…..para mi el vacio es una fina y redondeada losa de verde prado como los de mi tierra, facil de abordar y emcumbrar.
Yo no tengo miedo al folio en blanco, yo tengo miedo a la memoria en blanco, el dia que eso ocurra, mejor sera desaparecer. Mientras tanto mi unica ocupacion es tratar de asimilar todo lo que pasa por mi cabeza y recordarlo cuando hirviendo de ideas me ponga delante de ese papel en blanco que rapidamente se cubrira de palabras….mas o menos acertadas pero palabras….
Una vez me rindo antes tus columnas. Si literariamente tiene una gran valor, mucho mas me aportan vitalmente.
Un saludo
^~¥~^
A®L
PD:….soy capaz de escribir 20 folios del tiron sobr la discografia oscura de Led Zeppelin en el mismo tiempo en que escribiria 5 malditas postales de navidad que se me atraviesan en la garganta de mi pluma.
Qué difícil también es dar las gracias.
ResponderEliminarSupongo que, como en muchos otros casos, lo que cuenta es el detalle.
ResponderEliminarLo que cuenta es el contable, y no les gusta que les cosifiquemos.
ResponderEliminarCíñete a opinar sobre membrillos, que no sabes la falta que hace.
ResponderEliminarEsta mañana he ido al mercado y me he comprado un membrillo. Mientras veníamos al trabajo, hemos estado hablando un rato y hemos descubierto que tenemos muchas cosas en común.
ResponderEliminarQuién sabe, puede que este membrillo sea mi media naranja.
¿Insinúas que un membrillo sólo vale lo que media naranja? Poco futuro tenéis.
ResponderEliminarTampoco estoy diciendo que este membrillo vaya a ser ya el definitivo. He decidido ir poco a poco…
ResponderEliminarEsta noche vamos a ir a cenar a un sitio bonito e íntimo, para conocernos un poco mejor.
¿Se pondrá celoso si pido una pera de postre?
Te recomiendo que la compartas, y que le dejes claro que tampoco la pera será la definitiva (aunque el membrillo ya lo sepa).
ResponderEliminarEs más difícil atravesar una pera que un membrillo.
ResponderEliminarY el membrillo no tendrá problema en comprenderlo, Marlow. Si te lo pone fácil es porque en el fondo le encanta hacer chof y quedarse como un membrillo espachurrado.
Esta mañana en la tele decían que los ciervos están en época de berrea.
¿Qué hace una chica como yo, en un sitio como este???
Pera, membrillo, ciervo, atravesar… Es todo entre inquietante, sórdido y tremendamente desconcertante.
ResponderEliminarMarlow, tú lo que tienes que hacer es hablar con ella (que, como todo el mundo sabe, quiere decir: deja que ella hable y asiente). Y suerte.
pero entonces, ¿hay cena con el membrillo?
ResponderEliminar¿O hay cena con membrillo? No pillo una.
Cuidado Marlow, al final los membrillos siempre acaban pegandotela con una buena loncha de queso de Burgos
ResponderEliminar^~¥~^
A®L
y recuerda tu has de tener siempre la ultima palabra…..
ResponderEliminar…..
…..”si, cariño”
^~¥~^
A®L
Es que tú lo has dicho, David. El vacío no tiene ni siquiera filo. Es bien redondo. Suave incluso. Como los membrillos.
ResponderEliminarHasta que te los metes a la boca.
Yo no sé si habeis probado un membrillo recién cogido. Parecen suaves y son ásperos como la lengua de un gato. De un gato que sonríe ;-)
Marlow, no hagas caso de los consejos de otro hombre. Tú escucha el consejo de una tía.
A nosotras lo que nos gusta es hacer chof. Los tíos valientes (después de la berrea, ¿sólo quedan los valientes?) que atraviesan el espejo / o el membrillo / o el vacío; para cogerlos de la mano y celebrar con ellos la fiesta de no cumpleaños de Alicia.
Y todo lo demás son cuentos.
Bueno me voy que ya desvarío un poco.
Saludos y suerte.
El camino es por allí —-> :-)
Al final, no hubo cena. Me quedé compuesto y sin membrillo, esperándolo toda la noche, con el corazón estrujado como una pasa.
ResponderEliminarSi ni siquiera los membrillos ven que la vida es más sencilla de lo que creemos, apaga y vámonos.
Así que pienso atravesar ese membrillo desgraciado en cuanto lo vea. Al otro lado, todo es más fácil: arriba es abajo y viceversa.
“Lindo, lindo, parpadea…”
Feliz no cumpleaños a todos.
Son todos iguales. Los membrillos, digo. Bueno, y los delanteros argentinos.
ResponderEliminarNo me tires de la lengua con los delanteros argentinos…
ResponderEliminarPues que casualidad….yo no encuentre una que me trate coom merezco (una mezcla de entre a patadas y como un peluche)….pero bueno…sera que tengo el lado femenino muy marcado…pero en el trato nunca he tenido quejas….sera que mi lado femenino se ha mezclado con demasiadas mujeres de lado mascullino muy marcado…sera eso acercarse a a ser gay??? :P :P :P
ResponderEliminar^~¥~^
A®L
Yo una vez tuve el lado femenino muy marcado. La ropa me quedaba fatal, era un descontrol.
ResponderEliminar¿Cómo tenías el otro lado?
ResponderEliminarPor esta vez estoy de acuerdo con Marlow, la ropa de chica le queda fatal.
ResponderEliminarHabéis hecho de mi problema con los membrillos lo mismo que hacéis con la columna de David…
En realidad, lo que quiero decir, es que he estado todo el fin de semana peleándome con un ajo, no con una cabeza, si no con un diente. Por cierto, ganó el ajo. Y la verdad es que me ha gustado.
Pues eso, cuidado con la fruta, porque siempre mancha.
Como el chorizo.
ResponderEliminarMarlow, seguro que te quedaba fatal porque te marcaba….la ropa…no el lado femenino….:P
ResponderEliminar^~¥~^
A®L
Aquí lo que hace falta es un lagartijo con escalera.
ResponderEliminarNo te hagas ilusiones.
ResponderEliminarComo si le hiciera falta…..;)
ResponderEliminar^~¥~^
A®L
Son muy necesarios los lagartijos con escalera.
ResponderEliminarya no se de que hablaba….
ResponderEliminarsi de lagartijos o de ilusiones….
^~¥~^
A®L
Me da asco este mundo
ResponderEliminarAsco observar un noticiario.
O soy un tio raro o todo el mundo esta loco
-Hoy hace 6 meses que asesinaron a Jose Couso, y no ha pasado nada…Observo como una mujer llora porque lleva 6 años sin el padre de sus hijos a su lado y aun no sabe porque. Hace 6 años mataron a un galego, a un paisano
-Ayer mataron a una persona. En España mueren al año mas de 1000 personas a manos de semejantes. Ayer mataron a una persona que defendia a un crio de 14 años de que lo lincharan una pandilla de salvajes que se esconden detras de la camiseta de un equipo de futbol, de un maldito equipo de futbol, de un maldito partido de futbol. Le dieron dos salvajes patadas que lo matarian y despues le pidieron perdon al darse cuenta de que “defendia” sus mismos “colores”. Ayer mataron a un galego, a un paisano.
Cada dia muere gente en España, en Irak, en Colombia, en Estados Unidos, en el mundo. Cada dia muere un paisano. Un paisano de Bagdag, de Bogota, de Miami. Cada dia decenas de persona matan a decenas de personas.
Estoy cansado. Estoy cansado de mis problemas, de mi vida. Que no cansados estaran las victimas de injusticias. Que no cansada estara esa madre que se ha quedado sin el padre de sus hijos. Que no cansada estara esa madre que hoy lloraba porque no se creia que en Santiago le habian matado a su Manuel. Estoy cansado de que mis triviales problemas me cansen. Estoy cansado de no darme cuenta de que soy un privilegiado. Estoy cansado, cansado de este mundo. ^~¥~^
A®L
PD:se que no es ni lugar ni momento, pero hoy me doy asco, asco incluso de mis neuras y de tener que desahogarme. Disculpadme
Si te cansas de tu vida, perdiste.
ResponderEliminarCreo que hace tiempo que perdi, es mas, tengo la recurrente idea que se nace sin posibilidad de ganar.
ResponderEliminarTengo la impresion de que alla arriba o donde sea, alguien hcae trampas al barajar
^~¥~^
A®L
Si hubieras perdido, no seguirías aquí, preocupado por la mano que llevas. Quizá tengas malas cartas, pero cada poco barajan de nuevo. Además, se va aprendiendo a jugarlas.
ResponderEliminarCon solo estar no se gana.
ResponderEliminarNo tengo malas cartas, las tengo mejores que el 95% de la humanidad, (igual que seguramente la mayoria de los que aqui escribimos), pero por desgracia esas cartas stan marcadas.
Con cartas tan buenas, las juego relativamente bien, no me quejo, solo que al final, todos perderemos todo lo que hay apostado encima de la mesa.
^~¥~^
A®L
No perdemos, porque queda partida.
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