Uno se pone a mirar algunas historias, y encuentra que soportan que se las mire desde varios lugares. Y siguen siendo, en esencia, la misma historia. No todas aguantan este tratamiento de cristal tallado, claro, pero creo que las buenas sí. Estos días me he encontrado buscándole nuevos lugares a Politkovskaya, para varios periódicos. De momento, se ha publicado lo de El Observador, de Montevideo, y hay pendiente algo más. Y, aparte del asunto de las caras, me voy dando cuenta de la potencia que tiene el blog para ir fraguando (o entrenando) ideas que luego alimentan otros lugares.
balazos: Politkovskaya
balazos: Leído en otro
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19.10.06
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Qué bueno ese salto del blog al papel. Qué sintomático, que diría nuestro amigo sintomatico.blogspot.com
ResponderEliminarTengo algunas curiosidades particulares sobre este caso que te preguntaré por línea interna.
Me ha dado como impresión eso de encontrarme agarrándome de nuevo a ideas que habían nacido en el blog. Y yo que pensaba que esto no servía para nada...
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