Estos días, más que nada, me tropiezo con las cosas. Pero son tropiezos sin más, sin tiempo siquiera para volverme y revisar en qué agujero acabo de meter el pie. Y eso a pesar de que algunos de los agujeros, así, de pasada, prometen. Dentro de uno me encontré a los dos tipos de arriba, de visita en palacio. Son de Hamás, y están en el lugar donde trabajaba Mahmud Abbas como quien ha llegado bien al apartamento de la playa y quiere avisar a mamá o algo. Ya digo que no he podido más que tropezarme con ellos.
Un poco más adelante, en el mismo día, hoy, vamos, me he encontrado a unos (los de ANV) que hablaban de condenar o no condenar el terrorismo etarra, y que al final decían que mejor no, porque habían pasado ya muchos años con "esa palabra maldita en la boca".
Y así he pasado el día, de tropezón en tropezón (alguno más ha habido), con la suerte de no haber encontrado además tiempo para mirarme los costados, que deben de estar cuajaditos de moretones.
Technorati tags: Hamas Palestina terrorismo ANV
15.6.07
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Que alguien le robe otro reló a Bush...
ResponderEliminarNo sé si merecemos otra vez algo tan bueno.
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