Algunos periodistas hablaban de operaciones sin historia posible, sin posibilidad de reportaje. No conocí ninguna. Incluso cuando una operación estaba inmovilizada, siempre quedaba la pista. Los que decían eso eran los mismos periodistas que nos preguntaban para qué diablos hablábamos siempre con los soldados, los que decían que jamás habían oído hablar a un soldado más que de coches, de béisbol y de tías. Pero todos ellos tenían una historia, y en la guerra se veían empujados a contarla.
(Despachos de guerra, Michael Herr)
Es que siempre hay que contarla.
ResponderEliminarSí, pero para eso hay que verla. Y como contaba el otro día Enric González, no es lo mismo verla antes que después de que ya la ha escrito otro.
ResponderEliminar