Nunca pensé que se pudiera tener El dinosaurio de Monterroso. Me han preguntado alguna vez con toda naturalidad si tenía La metamorfosis de Kafka, me la han pedido prestada, la he perdido en ese préstamo; y yo mismo le he pedido, devuelto y comprado varias veces. Para tenerla. También me ha sucedido todo lo de antes con El perseguidor de Cortázar, o con el perfil de Marilyn que escribió Truman Capote, y que se encuentra en Música para camaleones. He comprado y he prestado varias veces los libros que los incluyen. Para tenerlos. Para no perderlos. Pero sólo se conoce un caso similar con El dinosaurio de Monterroso.
Se ha contado muchas veces que en una recepción o acto similar con brillantes lámparas de araña y tacones afilados, le preguntaron a una señora qué le había parecido El dinosaurio de Monterroso. Ella, quizá asumiendo que todos los relatos son como La metamorfosis y pueden tenerse, dijo que todavía no lo había terminado. Por eso es el único caso conocido que, al salir de la recepción, podría telefonear a un amigo y preguntarle si tiene el cuento —no me reprochen la benevolencia, por favor—. Si yo fuera ese amigo —dejemos de lado todas las implicaciones y ciñámonos a la historia—, si yo fuera ese amigo, digo, me extrañaría la pregunta, porque hasta que hoy lo he visto en el libro que vendían con El País, nunca había imaginado que se podía tener el cuento: “Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí”. Así que se lo recitaría. Probablemente cambiando alguna palabra: poniendo "aún" en el lugar de "todavía", por ejemplo.
Y lo haría con la certeza de que no se puede tener El dinosaurio de Monterroso, que quizá es la metáfora de la literatura perfecta: la que existe sin que a nadie le parezca necesario que figure en ninguna parte. La que existe aunque le bailemos las palabras, porque ni siquiera las necesita ya, como no necesita el papel, ni necesitamos guardar en la estantería el libro que lo contiene. Por eso me extrañó verlo en la página 59, y por eso lo ofrezco desde aquí en préstamo olvidadizo y distraído a quien lo quiera. Porque no me atrevo a abrirlo y arrancar el cuento.
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La literatura verdaderamente buena, como afirma Borges, resiste las malas traducciones, los errores, incluso las mutilaciones…
ResponderEliminarExiste una versión muy difundida del cuento de Monterroso, que alguien, afanosamente, recreó. La transcribo:
Cuando despertó.
La versión del Dinosaurio que yo conocía era “Todavía estaba allí”. Está muy bien conocer las otras :-)
ResponderEliminarY todas son de Monterroso.
ResponderEliminarA mi me pusieron un notable por un trabajo sobre “El dinosaurio de Monterroso”.
ResponderEliminarDicho trabajo consistia en un resumen con mis propias palabras del cuento.
No os lo transcribo porque tampoco os quiero aburrir….;)
^~¥~^
a.®.L
Acabo de leer que Scorsese planea una adaptación del susodicho cuento, con Robert de Niro en el papel de dinosaurio.
ResponderEliminarLos Weinstein ya le han dicho que no tolerarán nada que supere las tres horas de duración.
Sinceramente, si empiezan a meter cortes ya, se cargarán la esencia del relato.
Sospecho que quiera basarse en el notable resumen de Alastair.
ResponderEliminarSeguro que empezo por el segundo tomo…
ResponderEliminares q es un pelin menos denso…..
:P
PD: No al tijeretazo!!!
^~¥~^
a.®.L
El mundo, como el río, se nos va, Luis. No sabes lo que pides.
ResponderEliminarSiento no poder ayudarte, Luis, de la prensa yo solo guardo los articulos de los columnistas de ABC (me estoy “construyendo” un libro que ni el mismisimo Tom Sharpe..)
ResponderEliminarAlgun dia este libro lo enseñaran en la facultad de Ciencias de la Informacion. La asignatura sera “Fascismo y demagogia en el mundo periodistico contemporaneo”…
Un dia fueron Rosseau, Voltarie, Mostesquieu….dentro de poco seran Capmany, De los Rios, Ussia, Los Santos…..
:P
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a.®.L
ALGUIEN GUARDA, TAL VEZ ENCIMA DEL ALGÚN PERIÓDICO, UNA CAJA DE TELEPIZZA DEL MIÉRCOLES 7 DE ENERO DE 1995?
ResponderEliminarSi es así, ¿queréis hacer el favor de tirarla? Han pasado ocho años, por amor de Dios…
En las prisiones turcas, a eso no lo llaman recompensa.
ResponderEliminar¿Has estado alguna vez en alguna?, ¿qué horrible pasado escondes?…
ResponderEliminarMarlow cuenta cosas terribles de su paso por ese sistema penitenciario.
ResponderEliminarNo conoces el infierno hasta que tienes una tortuga mordiéndote el pezón izquierdo durante 72 horas, sin soltarlo.
ResponderEliminarO hasta que obligan a un armadillo a frotarse contra tu pierna hasta que pierdes la consciencia.
Dios mío… habéis abierto una puerta que debería haber quedado cerrada para siempre…
No te lo quedes, ¡sácalo, sácalo!.Es la mejor terapia.También puedes probar a volver a la prisión turca, para quitarte de encima definitivamente los fantasmas que te atormentan.
ResponderEliminarEs como aquello que hacíamos de pequeños, cuando nos caíamos haciendo cualquier cabriola en bici, y la volvíamos a repetir inmediatamente para no coger miedo al juego en cuestión…¿o sólo lo hacía yo?.
:-)
Yo le daba un empujón a la bicicleta y me echaba a llorar.
ResponderEliminarTodavía le guardo rencor a la chica que nos cuidaba por las mañanas. Me quitó las dos ruedecitas de la bici que iban acopladas a la rueda trasera y no me las devolvió jamás.
Cierto día un crítico indignado le espetó a Monterroso que el dinosaurio no era un cuento. Tito le contestó sin inmutarse: “No claro que no, tiene usted toda la razón. No es un relato, es una novela”.
ResponderEliminarY ya sabes, David, que existen dos clases de tontos: los que prestan los libros, y los que los devuelven (yo también pertenezco a los dos casos)
Pues yo creo que es verso libre. Ahí queda eso.
ResponderEliminarNo quiero crear polémica entre el gremio de los poetas, pero yo creo que el verso siempre tiene que ser libre. Estamos en el siglo XXI, por Dios, la exclavitud es cosa del pasado.
ResponderEliminar¡Libertad para los versos!
¡Y más para los versos vascos!
ResponderEliminary para los dinosaurios
ResponderEliminar¿habra dinosaurios vascos?
ResponderEliminarsi los hay….¿que rh tendran?
¿que opinara arzallus sobre el rh de los dinosaurios vascos?
¿Arzallus….no sera un dinosaurio?
^~¥~^
a.®.L
¡Basta ya! Los versos no son libres, ni lo han sido nunca, pese a que algunos quieran reinventar la Historia.
ResponderEliminarEso te digo yo a ti, listo.
ResponderEliminarGrandísimo texto. Me recuerda mucho al de la semana pasada. Claro que mi vida es un continuo “deja vu”. A veces, Matrix tiene estos fallos…
ResponderEliminarTuve la misma impresión al entrar en la página y encontrármelo, así que ya no me atreví a hacer nada.
ResponderEliminarMe tranquiliza (poco) no ser el único.
oh dios..matrix no…..
ResponderEliminar^~¥~^
a.®.L
PD: por cierto, David, el otro dia vi tu libro en una libreria de la estacion de Atocha cuando fui a despedir a la niña.
ResponderEliminarEstaba justo debajo del “Estupidos hombres blancos” de Michael Moore que habia cogido para comprar y costaba medio € menos de lo que me costo cuando lo compre a traves de la FNAC
manda carallo……:P
^~¥~^
a.®.L
Que devuelvan el dinero los de la Fnac. Cómo son…
ResponderEliminarNo seré yo el que diga que llevamos desde el 31 de octubre sin columna…
ResponderEliminarTampoco yo.
ResponderEliminarpues a falta de columna….
ResponderEliminarmi homenaje a un año de lagrimas negras y lucha de un pueblo por erguirse….
un año en el que nos han engañado y nos quieres serguir engañando…
NUNCA MAIS!
http://miarroba.com/foros/ver.php?foroid=142080&temaid=1180486&msgid=8840205#8840205
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a.®.L
Ya veo cuál es el rollito con la columna… Esta semana es un Director’s Cut de la de hace dos semanas.
ResponderEliminarImagen remasterizada.
Nueva puntuación.
Sinónimos nunca vistos.
Márgenes que nos perdimos en el original.
Imprecindible. Una joya (como una olla).
Espera a que salga la peli…
ResponderEliminarLo hace para darnos tiempo a que leamos el libro.
ResponderEliminarMe uno al homenaje. Me aterra pensar lo rápido que puede olvidarse todo y que sólo se recuerde cuando vuelva a repetirse el desastre, en otro mar, en otra costa. Me imagino todas las cintas de vídeo apiladas en la misma estantería, la del Erika, la del Exxon Valdez, y arriba del todo las del pueblo gallego sacando el chapapote con palas.